Una capa de película decorativa (como una veta de madera, un color sólido o un patrón) impregnada con una resina de melamina que consiste en melamina y formaldehído (resina MF) se une a un sustrato de madera como tableros de fibra o materiales de núcleo de tableros de partículas. Los productos resultantes se utilizan en muebles, encimeras, paredes, pisos y otros lugares. La melamina contenida agrega propiedades como resistencia al calor, al agua y a los químicos al producto final. También se incluyen propiedades antibacterianas, lo que hace que los laminados de melamina de alta o baja presión sean la opción ideal, por ejemplo, para encimeras de cocina.

Los soportes de madera mencionados anteriormente también contienen melamina: la madera contrachapada, los tableros de partículas (PB), los tableros de fibra de media densidad (MDF), así como los tableros de fibra de alta densidad (HDF), los tableros de virutas orientadas (OSB) o la madera laminada (LVL), se unen con adhesivos que contienen melamina que contienen urea-formaldehído (UF). También aquí la melamina añade al producto sus propiedades únicas; reduce la liberación de formaldehído libre, mejora la resistencia al agua de las tablas.

Se utilizan sistemas de resina de melamina especialmente formulados para producir recubrimientos altamente duraderos. Esto incluye acabados transparentes para papel, telas, madera y metales. Mediante la pigmentación de los sistemas de resina se pueden obtener acabados de esmalte opacos. Los encontrará en frigoríficos, lavadoras, equipamiento hospitalario y utensilios de cocina, donde muestran sus puntos fuertes: resistencia química y al agua y propiedades mecánicas como la resistencia al rayado.
Una aplicación popular se encuentra en la industria automotriz. Las resinas MF en los recubrimientos ayudan a reducir las emisiones de disolventes y, por tanto, tienen un impacto positivo en el medio ambiente. 

Las resinas de melamina son fuertemente termoestables y pueden moldearse en una variedad de productos para nuestra vida diaria. Los moldes son resistentes al calor, inodoros e insípidos, además de no conductores. Al agregar pigmentos a la resina, son posibles varios colores y combinaciones de los mismos. Los productos de moldeado final incluyen
electrodomésticos, vajillas y mesas, mangos de utensilios, enchufes eléctricos y mucho más.

Aplicadas a los textiles, las resinas MF mejoran la resistencia a las arrugas y añaden propiedades retardantes de llama. El papel tratado con melamina es más resistente a las arrugas y está impregnado contra la humedad. El mejor ejemplo son los billetes de banco: a pesar de años de uso intensivo, no se arrugan mucho y también sobreviven a la lavadora.

Retardantes de llama  
Se utiliza principalmente en pinturas especializadas, productos textiles como ropa contra incendios y en espuma de uretano flexible que se utiliza en la industria de muebles y ropa de cama, así como en productos electrónicos.  
Plastificantes para el hormigón
La melamina también entra en la fabricación del polisulfonato de melamina utilizado como superplastificante para la fabricación de hormigones de alta resistencia.